Se han multiplicado las estrellas en el Universo
bajo el cielo gris de la nostalgia,
promesas truncadas, sonrisas apagadas
han quedado marchitas
cuajadas de misterios.
Los ríos han aumentado su cauce
de lágrimas por siempre infinitas,
los llantos quejosos de los tiempos
han parado su péndulo.
24 de octubre, yerto y triste,
te has llevado entre tus alas
el futuro del mañana,
esos soles dorados un día trillarían
los campos pedregosos de ilusiones,
hoy todos lloran sus silencios,
vuestras ausencias han dejado un hueco,
un frío en el alma de los hombres,
allí cantaréis vuestras plegarias,
ángeles puros con vuestros trajes de nácar,
cantaréis dorados sueños,
esos sueños dorados de poeta.
C.V.M.
(Escrito a raíz de la tragedia de Ortuella,
aquel 23 de octubre de 1980 una explosión
de gas en un colegio segó la vida a 50 niños)
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